Los autónomos nos sentimos desamparados.
Esto no es una novedad, desde siempre somos los grandes olvidados de las administraciones pese a que generamos nuestros propios puestos de trabajo y muchísimos más, que dependen del riesgo que nosotros asumimos.
Sin la existencia de autónomos y pymes, muchos de los puestos de trabajo estables desaparecerían y sin la presencia de negocios en nuestras calles, éstas carecerían de vida.
Necesitamos el apoyo de todos, administraciones y ciudadanía.
Mañana, 24 de febrero de 2021, los autónomos paramos, y una buena forma de ayudarnos a visibilizar estas reivindicaciones sería minimizar el consumo en la medida de lo posible. Somos vuestras familias, amigos y vecinos, y os necesitamos.
Con la pandemia que estamos sufriendo
Nuestra situación se ha agravado todavía más si cabe. Después de casi un año en estado de alarma, acatando reducciones de aforos, recortes de horario, y llevando a cabo las medidas sanitarias pertinentes en nuestros negocios, seguimos sumidos en una situación de incertidumbre extrema, a expensas de las decisiones que toman las administraciones sin llegar a darse cuenta de que son totalmente insuficientes.
Ayudas anunciadas a bombo y platillo que no llegan a todo el que las necesita, subvenciones llenas de letra pequeña que dejan fuera a una gran mayoría de autónomos, y préstamos bancarios que no hacen más que agravar el problema. Nada de esto es ni eficiente ni suficiente. Hay otras formas de compensar esta grave situación, condonándose impuestos y dejando de ahogar siempre a los pequeños.
Situaciones extraordinarias requieren medidas extraordinarias.
Quizás haya llegado el momento de que las administraciones se reinventen y dejen de ser el enemigo de los autónomos.